martes, 1 de junio de 2010

IV.- LA ENTREVISTA

-Tome asiento por favor.

Dijo la gerente mientras revisaba la solicitud.

-Ingeniero ¿Sabe a que nos dedicamos?

-La verdad no, de hecho yo solo pasaba por el lugar y se me hizo interesante su empresa y quisiera conocer su propuesta.

-Bien. Nosotros nos dedicamos a las telecomunicaciones, y el puesto vacante que tengo es en el área de relaciones industriales, algo no muy relacionado a su área de experiencia.

-Lo entiendo perfectamente
Respondió el.

-Sin embargo como puse en la solicitud, quiero cambiar de giro dejar el stress de la logística de lado y abrirme camino en otro ramo.

Siguió hablando y checando puntos estratégicos y término con una segunda cita con el que seria su jefe directo,

Salió triste pues no la había vuelto a ver pero antes de llegar a la recepción la vio. Sacando unas copias y riendo melodiosamente con una compañera, su visita había valido la pena.

Al salir del edificio, pensó racionalmente lo que había hecho. Falto a trabajar y solicito otro empleo solo por ver a una mujer de la cual no conocía nada, y de la cual no tenia un solo indicio de que estuviera interesada en el.

Camino a casa volvió a soñar despierto, trabajaban juntos y eran felices jugando con sus hijos en el patio trasero, la vida seria hermosa.

Y sin darse cuenta, la situación que lo había preocupado este último mes se había esfumado.

Al entrar a su departamento replanteo su vida, y pensó en el lugar en el que estaba ahora y la oportunidad que se le había abierto y por supuesto la hermosa mujer que había conocido y con la cual quería hacer un compromiso por el resto de sus días.

Una semana habia pasado y no habia recibido la llamada de la empresa, esto le empezo a preocupar ya que sin tener ese trabajo seria muy dificil volver su sueño realidad.

Salio a su trabajo cabisbajo y sin ganas, el trafico era pesado como siempre, camino a traves del estacionamiento pensando en su renuncia pues ya no se sentia a gusto.

-¡Debí haber tomado el metro! tal vez asi la hubiera visto. Se dijo a si mismo.

-¡Buenos días Ingeniero! dijo la amable recepcionista de su empresa.

-Buenos días Clarita. Dijo el sin mucho animo.
Eras las 8:00 a.m. y el ¡Ya se queria ir a casa!

La mañana transcurrio de la manera mas lenta, asi habian sido los ultimos meses, no queria saber nada de los perecederos era lo mas bajo para el siendo que era una de las areas que mas dinero metian a las arcas de la empresa, pero el era un alto ejecutivo ¡No un transportador de verduras!

Una pieza de musica clasica empezo a emitirse desde su smart phone, era el unico que apreciaba esa musica por ahi ya que toda la gente de su area preferia la musica de banda o regueton, volviendo a la realidad contesto velozmente su telefono.

-Adelante. Respondio el.

-Hola buenos días con el Sr. Valdez,

-¡Si soy yo! respondio con euforia pues esperaba esa llamada de la empresa de telecomunicaciones.

-Mucho gusto le estoy llamado para ofrecerle soluciones de credito para las necesidades que nos llegan a surgir y tambien imprevistos, que siempre tenemos que tener listos, solo necesito que me confirme su direccion para enviarle su solucion a los problemas financieros.

Molesto por que habia sido decepcionado por esa llamada le respondio al joven que le atendía.

-¡No me interesa ninguna tarjeta de credito!

-Lo entiendo Señor pero lo que yo le voy a enviar es mucho mas que una tarjeta de…

-Lo siento estoy esperando una llamada importante respondio de manera cortante.
Acto seguido colgo su telefono. Estaba harto de ese tipo de llamadas con tan poco profesionalismo.

Su telefono volvio a sonar, ¡Esta gente no entendia razones! en un ataque de ira contesto:

-¡Ya le dije que no me interesan sus tarjetas!

-¿Ingeniero Valdez? le estoy llamando de Nextcom Telecomunicaciones para la vacante que aplico la semana pasada. Contesto extrañada la voz femenina del telefono.

-Oh cuanto lo siento Señorita, es que me acaban de llamar para ofrecerme una tarjeta, Respondio, con tanta pena que hasta el jitomate mas rojo pareceria palido junto a el.

-¡No se preocupe! respondio con una sonrisa su interlocutora, posteriormente le explico de su nueva entrevista.

Una sonrisa se dibujo en su rostro, cosa que no habia pasado en varios meses.

El dia transcurrio sin novedades, cuando se dirigia a casa se emociono al pensar lo que podia pasar, su vida estaba a punto de cambiar.

Se acosto temprano ese dia pues no queria quedarse dormido para su entrevista con el Señor Destino.

Se levanto muy temprano y preparo su mejor discurso para impresionar a quien seria su jefe, de ello dependia su futuro amoroso y laboral,

Arribo a la empresa 15 minutos antes de la hora acordada no queria contratiempos.

-Buenos dias Señorita vengo con el Lic. Alvarez para una cita de trabajo.

-¿El Ingeniero Valdez?

-Es correcto, respondio el.

-En un momento le atendera, tome asiento por favor.

Se sentó de nuevo en esos sillones modernos, mientras leia una revista interna de la empresa.

-¡Señor Perez!

-Alzo la vista de su revista y la vio de nuevo, ¡Vaya que era hermosa!
Que afortunado era el Sr. Perez de poder hablar con ella.

-¿Ingeniero Valdez? dijo un hombre alto y con barba de candado.

-Si soy yo. Respondio el.
-Pase conmigo por favor.

El lo siguió por los pasillos de la compañía y con la mirada la iba buscando, ¿Quien seria ella?, ¿En que departamento trabajaría?, los nervios lo querían traicionar pero el era mas fuerte, finalmente llegaron a la oficina del Lic. Álvarez.

-¡Buenos dias! dijo el hombre al tiempo que le extendia su tarjeta de presentacion.

Tomo su asiento y empezó a revisar sus papeles hasta que saco un folder y comenzó a leerlo.

-Veo que viene a aplicar al puesto de relaciones industriales. ¿Que experiencia tiene en el area?

-En el area como tal no mucha, pero por mi puesto que tengo en la empresa hago uso de las relaciones industriales frecuentemente.

El hombre de barba de candado lo miro de una forma no muy agradable y esto lo puso mas nervioso, no solo iba por un nuevo empleo, iba por la mujer que habia soñado las ultimas semanas y su futuro dependia de esta entrevista y este hombre se lo estaba impidiendo, citaba cuan distintas eran las areas en las que el tenia experiencia y las de esta empresa. De pronto llego a la pregunta crucial.

-¿Por que quiere dejar su actual empleo?

Sudo frio y se formo un nudo en su garganta, balbuceo sus primeras palabras, pero recordo que tenia que mostrar confianza pues era su futuro el que dependia.

-Soy una persona a la que le agradan los retos, no tengo miedo a lo que venga, he aprendido mucho en mi trabajo pero ya no me siento retado y eso me hace sentirme frustado, busco esta oportunidad para salir airoso en una nueva etapa en mi vida.

El hombre le respondio.

-Esa es precisamente la actitud que buscamos en la compañia si no llega alguien con mas experiencia en el ramo el trabajo sera practicamente suyo, espere mi llamada para su entrevista final con nuestro director nacional.